Quiero dedicar mi vida a mi vida. Es por lo único que daría la vida. Por mi vida. Es que mi vida no es simplemente estar vivo, la vida física, la vida biológica. Mi vida es eso, pero no sólo. Es también mis amigos, toda la gente que quiero, las cosas que quiero, que me gustan. Es el laburo, la facultà, el compromiso también. Pero es también el ocio, el disfrute; es amar, profundamente, con o sin correspondencia. Mi vida es lo único que me pertenece. Lo único que manejo, que puedo controlar (?) y orientar hacia una dirección determinada. Yo soy mi vida.
Por gran parte de ella la atravesé considerándomé un mero observador, de la vida en general y, lo que es triste, de mi propia vida. Me consolaba, de algún modo en ello. Poco tiempo atrás me di cuenta de que estaba comenzando lentamente a ser protagonista, aunque sea de mi propia vida - lo cual en realidà es lo más importante que un ser humano puede protagonizar. Sin embargo, ahora estoy en una encrucijada en la que siento que están dirigiendo mi vida a través de la coartación de la libertà de una parte de ella.
No quiero. No quiero. NO QUIERO. Quiero mi vida, completa. Libertà, libertarios: dadmela.
Nadie es libre dedicando su vida a algo (o alguien). Dense cuenta.
Etiquetas: Ego
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